Ser Proactivos nos da la libertad para poder escoger nuestras respuestas a los estímulos del medio ambiente. Nos faculta para responder de acuerdo con nuestros principios y valores.
Si la única visión que tenemos de nosotros mismos proviene del espejo social, como por ejemplo “siempre te retrasas” “tienes que ser un artista” “comes como un cerdo” nos vamos a comportar de esa manera.
Hay tres mapas sociales, en los que hacemos responsables siempre a otros:
El determinismo genético: Que dice que culpa es de los abuelos.
El determinismo síquico: Que dice que la culpa es de los padres
El determinismo ambiental: Que la culpa es de todos los que lo rodean.
La productividad definida, no significa tomar solo la iniciativa, significa que, como seres humanos, somos responsables de nuestra propia vida.
Nuestra conducta es una función de nuestra decisión y no de nuestra condición, podemos subordinar los sentimientos de los valores.
Reactivos y proactivos:
Las personas reactivas se ven a menudo afectadas por el ambiente físico, si es bueno, se sienten bien, sino lo es, afectan su actitud y su comportamiento, dependen del ambiente social, construyen sus vidas con base en las conductas de otros.
El proactivo lleva el clima por dentro, actúa y no deja que otros lo hagan por él.
Aplicación Teoterápica
El enfoque proactivo consiste en cambiar de adentro hacia a fuera, ser distinto y de esta manera provocar un cambio positivo en lo que está allá afuera.
Si bien somos libres para elegir nuestras propias acciones, no lo somos para elegir las consecuencias de esas acciones.